Édgar Vivar, el muy querido “Señor Barriga” de El Chavo del 8, reveló recientemente cómo un milagro de salud lo hizo recuperar la fe y cómo, a lo largo de los años, pudo ver en su amigo Roberto Gómez Bolaños “Chespirito” una profunda creencia en Dios reflejada en sus composiciones para el famoso programa.
En entrevista con el medio católico “Desde la fe”, Vivar relató que tras sufrir dos tromboembolias pulmonares (una en Cusco, Perú, y otra al llegar a México) su vida cambió radicalmente. Fue internado en terapia intensiva y conectado a numerosos equipos médicos.
En ese momento límite, Vivar hizo una oración poderosa: “Si tú quieres, yo puedo”, le dijo a Dios. Para él, ese instante fue una epifanía. “Hoy sé que Él está ahí, y me hace sentir muy tranquilo, muy sostenido, muy confortado”, compartió.
LAS COMPOSICIONES DE CHESPIRITO DEDICADAS A PROMOVER LA FE
Además de este testimonio personal, Vivar recordó cómo Chespirito mostró una fe fervorosa en los primeros años del programa. “Roberto escribió canciones hermosísimas, como “Óyelo, escúchalo”, dedicada a Jesús; “Hermano Francisco”, en honor a San Francisco de Asís; y “Quisiera haber sido un pastor”, que habla sobre el nacimiento de Cristo”.
Para Vivar, estas letras son evidencia de una espiritualidad sincera que marcó el corazón de El Chavo del 8.
Aunque con el tiempo aquella fe se volvió menos evidente, Vivar asegura que Chespirito jamás la perdió. Y lamenta que hoy hablar de Dios en televisión se considere incorrecto. “La piel del pueblo se ha hecho muy delgada”, reflexiona.
Años después, tras haber encarnado al generoso “Señor Barriga”, Édgar Vivar no sólo guarda recuerdos entrañables de sus amigos, sino también una fe renovada que le dio una nueva oportunidad de vida.
