Policías son culpables

Un año y 12 días (377 días) tuvieron que transcurrir para que Margarita, madre de Genaro Arce Ruiz, cumplie­ra una promesa que le hizo a su hijo al momento de sepultar su cuerpo el 3 de mayo de 2018, alrededor de las 19:00 horas en el Panteón Nuevo.


Por: Fabián Pérez

Ayer, la madre de Genaro es­cuchó de viva voz la sentencia final del juez Cornelio Domínguez Mondaca, quien declaró culpables de abuso de autori­dad, tortura y homicidio doloso a los tres policías implicados en el caso.



“Yo sabía bien que mi hijo no se quitó la vida, fueron los po­licías los que lo golpearon bru­talmente y por causa de esos golpes él murió. Finalmente le cumplí la promesa de hacerle justicia cuando sepulté su cuer­po en el cementerio”, expresó.

Señaló que Dios y la Vir­gen la dieron la fortaleza para soportar noches de insomnio y días sin poder comer, como normalmente lo hacía con su hijo, antes de que muriera en las celdas preventivas de Segu­ridad Pública.



Margarita Ruiz Cota dijo que espera que el 20 de mayo se dé la pena máxima a los culpables de asesinar a su hijo.



“Gracias a Dios se hizo jus­ticia. Agradezco a la gente que siempre me apoyó desde un principio, como es a los amigos de Genaro, a la abogada Mar­tha Jiménez, a Ivonne, Selene, Lore, Martha Solórzano, perio­distas y reporteros que siempre estuvieron cubriendo el caso”, reconoció.

Martha Irene Jiménez Hernández, asesora legal de Margarita Ruiz, adelantó que el 20 de mayo, en punto de las 10:00 horas se conocerá de manera individual cuántos años podrían recibir de con­dena los agentes declarados culpables.



Mencionó que un juez califi­cador se encuentra prófugo, por lo que espera que próximamen­te sea presentado.



Indicó que, aunque la defen­sa de los agentes preventivos está en su derecho de apelar la sentencia, no hay forma de re­vertir este veredicto.



“Para mí, como abogada, fue muy duro estar peleando con la autoridad; fue tratar de demos­trar los hechos; fue tratar de demostrar, principalmente a la madre de Genaro, que su hijo no la abandonó, que lo privaron de su vida y que él no se suici­dó”, aseveró.