A partir del levantamiento, este martes, de la veda en la presa Álvaro Obregón (Oviáchic), los comercializadores de pescados y mariscos de Cajeme esperan una importante mejora en el abasto de las distintas especies que ahí se capturan, por lo que se espera que mejore la situación económica de quienes se dedican a la actividad, expresó Carlos Yánez González.
El encargado de una pescadería en el Mercadito Unión comentó que, además, se levantó también la prohibición de la captura de jaiba en costas del sur de Sonora, por lo que gran parte de los pescadores de la región están dedicados a esa especie, además que se ha registrado mal tiempo en las costas, y quizá será dentro de unas dos semanas cuando se normalice la pesca del resto de la variedad de escama de mar.
Las especies como tilapia, carpa y bagre generalmente desovan a partir de la primavera, y es cuando se impone la veda, reduciéndose por ello la cantidad de este producto que se comercializa en el mercado local por no poder extraerlo de las aguas de la presa; apenas se comenzaron a ver los proveedores de nuevo y es desde este fin de semana que se prevé se regularice el surtido, afirmó el entrevistado.
Menciono que hasta antes de esta semana sólo se podía obtener tilapia de cultivo –una parte de ella congelada—con precios un poco altos, y al abrirse la temporada de captura, esto deberá cambiar, para mejorar el costo al consumidor final.
Hasta ahora, dijo, se ha tratado de no incrementar mucho los precios, y algunos van a la baja como es el de la jaiba, que durante la prohibición estaba en 300 pesos y actualmente cuesta 220; los filetes se mantienen también en valores medios, como el cochito que está en 120 pesos; la liza en 100 pesos; el lenguado en 180; la tilapia de cultivo en 140.
El camarón, que por ahora es sólo de cultivo, está en 180 el de tamaño chico, en 190 el mediano y el grande en 220 pesos.
