Los agresores irrumpieron en el bar "Caballo Blanco" y abrieron fuego contra los asistentes para después provocar un incendio, lanzando bombas molotov, según algunos testigos. Otros dicen que rociaron gasolina para luego prender fuego.
El ataque a dejado un saldo de 28 muertos, y al menos 10 personas heridas de gravedad.
López Obrador confirmó la información de que algunos posibles responsables habían sido detenidos y dejados en libertad previamente, y dijo que su gobierno investigaría "a fondo" tanto el ataque como el presunto enlace entre la fiscalía estatal y grupos criminales.