Por: Jesús Alejandro QuinteroLos cementerios principales de la ciudad, como El Jardín, El Viejo y Las Piedritas, fueron los más concurridos por parte de la ciudadanía, quienes se dieron cita para rezarle a sus difuntos y convivir con familiares.
Rosa Flores, una de las asistentes al panteón El Jardín, destacó el hecho de que muchas personas acudan al camposanto para brindar ofrendas a sus seres queridos, ya que es una tradición de raíces mexicanas, la cual continúa con la misma importancia e impacto en la sociedad.
“Qué bueno que esta costumbre no se pierda, que la gente sigue acudiendo a los cementerios para visitar a sus familiares, amigos o conocidos, a quienes estimaron mucho en vida. Esto es una forma de reconocerles el valor que tuvieron para ellos y me da gusto que el Día de Muertos se continúe festejando de gran manera”, comentó la señora.
Por su parte, otra de las personas que acudieron al camposanto, Jesús Antonio Barrera, señaló que desde hace diez años asiste para velar a su padre y dedicarle algunas oraciones, así como convivir con la familia.
“Ya hace diez años que vengo con mi familia para visitar a nuestros seres queridos, principalmente a mi padre. Es una bonita tradición de reunirnos aquí con las almas de nuestros familiares, quienes se adelantaron en el camino. Es un ambiente de fiesta el que se ha vivido, con música, comida y rezos en muchas de las tumbas. Ha asistido tanta gente como en años anteriores”, expresó el visitante del Panteón Nuevo.
De igual forma la familia Ramírez Esqueda aprovechó su visita al cementerio para hacer limpieza en las tumbas de sus familiares difuntos y llevarles unas ofrendas, así como flores y veladoras para adornar el lugar.
“Nos gusta venir el mismo Día de Muertos porque está más desahogado, no hay tanta gente. Nos juntamos la familia para visitar a nuestros difuntos y honrarles sus memorias, les traemos cosas que le gustaron en vida para que puedan disfrutarlos en estos momentos”, externó uno de los hermanos.
