Mientras un grupo cerraba la carretera Internacional, el titular del INPI visitó Vícam para analizar temas de agua y linderos con integrantes de la etnia
Esta es la primera vez desde 1976 cuando fueron despojados de la Cuchilla, que la Nación Yaqui cuenta con el apoyo del Gobierno Federal para que se les restituyan sus tierras.
Y es que desde el pasado 26 de octubre a la fecha, la presidencia de la República ha llevado a cabo una serie de reuniones con los yaquis que tienen como fin dar certeza jurídica al territorio y al agua que les pertenece, dijo Adelfo Regino Montes.
Ayer, por encargo del presidente Andrés Manuel López Obrador, el dirigente del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) acudió a la Guardia Tradicional del pueblo de Vícam a informar sobre el diagnóstico que se realizó a los linderos del territorio.
Durante los meses de febrero y marzo el organismo a su cargo hizo un “caminamiento” por las tierras yaquis y para ello se tomó como base los puntos tradicionales que señala la tribu y el decreto emitido por el presidente Lázaro Cárdenas del Rio, indicó.
Derivado de ello, los yaquis acordaron promover dos amparos, uno de ellos para derogar el decreto del ex presidente, Ernesto Zedillo Ponce de León, emitido en 1997.
El segundo recurso será en contra de los ejidos Mora Villalobos y Bácum, los cuales están asentados en territorio yaquis, junto con otros 31 campos.
En la reunión, los integrantes de la tribu solicitaron a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que se haga una interpretación científica y legal del decreto presidencial sobre sus derechos de agua.
Y es que de acuerdo con los profesionistas de la tribu, se debe cuantificar lo captado en la Presa La Angostura (Tinaja Grande) y los derrames extraordinarios, desfogues y corrientes superficiales como los diques.
Como ejemplo, el año pasado la Conagua y la Unidad Estatal de Protección Civil informaron que hubo un desfogue de 811 metros cúbicos por segundo, lo que significa que en 58 horas se vertió a las presas El Novillo y Oviáchic lo que le toca a la tribu en un año, dijeron los yaquis. Regino Montes informó acerca de la falta del vital líquido en las comunidades de la etnia, principalmente en el pueblo de Pótam, problema que se acentúa debido a la pandemia de coronavirus y a la temporada de calor.
En el pasado, el Gobierno Federal invirtió en infraestructura para agua potable proveniente del acueducto de Guaymas, sin embargo, los yaquis dieron a conocer que las válvulas se encuentran cerradas, afirmó.
“Por norma constitucional el consumo doméstico tiene prioridad, por ello queremos plantear que haya una reconexión y que de algún modo, ante esta emergencia sanitaria las comunidades yaquis dispongan por lo menos del agua para consumo doméstico”, expresó.
“Hay una carencia (de agua) evidente, no estamos diciendo nada fuera de lo que no se ve y nosotros tenemos el deber de transmitirlo a ustedes y a otras dependencias del Gobierno Federal, Estado y municipales”, agregó.
Sobre el Acueducto Independencia, dijo que se trabaja en la consulta indígena junto con la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, a fin de dar una certeza jurídica a los planteamientos de la tribu.
“Parte del trabajo que realiza el INPI es difundir información en lengua materna sobre el coronavirus y las medidas que se deben tomar para evitar algún contagio, para ello nos apoyamos en la radio indigenista que se localiza en Etchojoa”, informó.
Justo cuando se realizaba este encuentro, yaquis de la Loma de Guamúchil realizaban un bloqueo en la carretera Internacional México 15, a la altura del Danzante Yaqui, como protesta por la obra del Acuaférico, promovida en Hermosillo por la alcaldesa Célida López Cárdenas.
