Por: Fabiola NavarroTal es el caso de la calle 5 de Febrero, entre Nicolás Bravo y 6 de Abril, donde comercios han cerrado y dejan abandonados los edificios, dando una mala apariencia.
Con el cambio de las oficinas de la Subdelegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se perdió gran parte del flujo de personas en ese sector y las ganancias económicas que tenían los comerciantes ambulantes, incluso la afluencia en las líneas del transporte urbano que por ahí circulan.
Lejos de eso, se observa un panorama desagradable con edificios abandonados unos tras otros; vidrios rotos, en sus paredes grafitis y en algunos casos completamente desmantelados.
Por la calle Sonora y Zaragoza, así como la Guerrero entre Sinaloa y Miguel Alemán, también se ve una situación similar, almacenando basura en sus banquetas y escombros que impiden el acceso peatonal.
Otras calles del centro comercial tienen edificios en estas condiciones, que sirven de refugio para que diferentes personas ingresen a consumir drogas.
