En el último mes, a una joyería le sustrajeron la tubería y el cableado del aire acondicionado que se encuentra en el techo; a un centro de copiado le robaron dos veces el aire acondicionado y el tendido eléctrico.
En otro local que funge como oficina particular, hurtaron en dos ocasiones, el mismo número de veces que robaron en una boutique.
A una pastelería la vandalizaron, le quebraron el vidrio frontal y robaron algunos pasteles, incluso en las oficinas del Tribunal Agrario, que cuenta con seguridad privada, también robaron.
El problema se presenta cada fin de semana y se agravó desde que cerró un centro nocturno que ahí se encontraba, pues el local fue asolado por malvivientes que ahí se esconden.
Dos comerciantes han puesto denuncia ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, sólo uno de ellos fue atendido, pero hasta el momento las autoridades no han resuelto el problema.
Ante el clima de inseguridad, los locatarios solicitan a las autoridades que hagan algo al respecto, pues manifestaron estar hartos de la situación que ahí se vive.