“No es Dios quien ha creado este virus para castigarnos, por decirlo así, sino que nuestro Señor no desaprovechará esta circunstancia o adversidad para hablarnos a todos y que nos acerquemos a él, más bien lo vemos como una consecuencia desconocida que se generó en algún lugar y se desató”, mencionó.
El representante de la
Iglesia de Dios en Méxicoagregó que tampoco se ve como una plaga del Apocalipsis, declaró que ciertamente sí creen que son tiempos finales en el cumplimiento de lo que dice la palabra de Dios.
“Es una oportunidad para acercarnos a Dios, generar que esto pasará, y cuando se vaya la tormenta nos tiene que dejar una lección, aprender a valorar más a nuestra familia, a las personas por encima de las cosas, especialmente a volver a Dios y a crecer espiritualmente y tener más aprecio por las cosas espirituales y morales antes que las materiales”, resaltó.
Durán invitó a la población a hacer una reflexión en medio de esta crisis, demostrar amor y aprecio por las personas, valorar el tesoro que se tiene en casa, así como la salud, trabajo y la oportunidad que Dios nos da y de darnos cuenta de lo que realmente vale.