Este miércoles, usuarios del servicio de internet satelital Starlink, desarrollado por la empresa SpaceX de Elon Musk, reportaron una caída generalizada del sistema que ha afectado su funcionamiento en diversas regiones del mundo, incluyendo México.
La interrupción ha generado una ola de inconformidades en redes sociales, donde usuarios expresaron su molestia por la pérdida de conexión.
La propia compañía confirmó la falla a través de sus canales oficiales:
“Starlink se encuentra actualmente en una situación de interrupción de la red y estamos implementando activamente una solución. Agradecemos su paciencia. Compartiremos una actualización una vez que se resuelva el problema”, informó la empresa en sus redes sociales.
MÉXICO AFECTADO POR FALLA DE STARLINK
De acuerdo con el portal especializado Downdetector, la afectación en México se ha concentrado principalmente en zonas de alta densidad urbana como la Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León y Chihuahua, donde se han registrado múltiples reportes de caída total o parcial del servicio.
Las estadísticas muestran que el 73 por ciento de los usuarios señalaron problemas relacionados directamente con la conexión a internet, mientras que el 26 por ciento reportó una interrupción total del servicio. El resto de los reportes corresponde a fallas diversas, como intermitencias o baja velocidad de navegación.
La falla no se limita a territorio mexicano. También se han recibido reportes desde otros puntos del mundo, como Madrid (España) y Texas (Estados Unidos), lo que confirma que se trata de un incidente de escala global.
EN ESPERA DE SOLUCIÓN
Hasta el momento, la empresa no ha detallado la causa específica de la interrupción ni ha proporcionado un tiempo estimado para la restauración completa del servicio. Sin embargo, el equipo de Starlink asegura que trabaja de forma activa para resolver el problema lo antes posible y mantener informados a sus clientes.
Esta situación pone en evidencia la creciente dependencia de servicios digitales y la necesidad de contar con redes más resilientes ante fallos inesperados, especialmente en contextos donde el acceso a internet puede ser la única vía de comunicación o trabajo.
